Las artistas visuales de la Universidad de Chile, Milena Moena y Carla Motto, regresaron a nuestro país hace pocas semanas. Dedicadas a su proyecto “Quemar El Miedo”, ambas egresadas de la Casa de Bello expusieron en México su obra que nace desde los feminismos y que invita a reflexionar desde una mirada “artivista” (arte-activismo), sobre el miedo que enfrentan mujeres y disidencias cotidianamente.
“El miedo en primera instancia te paraliza, pero a su vez moviliza, hace pensar nuevas formas de articular, nuevas maneras de enfrentar la vulnerabilidad. Nos permite rearticular los modos de cómo decir y mostrar las desigualdades, las opresiones y las injusticias que están ocurriendo en nuestros territorios”, aseguran ambas egresadas en una entrevista conjunta con Alumni Uchile.
“Este es un proyecto que busca reflexionar y encontrar puntos de inflexión, siendo nosotras las guías, pero el motor son todas esas personas que se han sentido y sienten convocadas. Para nosotras ‘Quemar El Miedo” no implica hacerlo desaparecer, lo que más bien nos interpela es la potencialidad de deshabitar el miedo que alguna vez fue habitado”, explican Carla y Milena.
Junto a eso, ambas egresadas indican que su obra es un “rito que desde el dolor, la rabia, la impotencia y -sobre todo- los miedos, nos entrelaza en un mismo gesto, en una sola sonoridad, una ‘cuerpa’ colectivizada para no olvidar que caminamos con muchas más. Prendemos el fuego y movilizamos esos miedos arraigados en nuestros territorios, en nuestras historias y en nuestras corporalidades”.
Experiencia en México y la U. de Chile
Con varias semanas en México, las artistas visuales agradecen el financiamiento de “Ventanilla Abierta” y el espacio que entregó el espacio de residencias artísticas independiente “Error Proyecto”, la cual generó vínculos en ese país.
“En México, activamos desde la memoria, desde el dolor, desde la transversalidad de los miedos y sus posibilidades de agenciar diferentes formas de lucha y resistencia. Tuvimos la fortuna de acompañar y ser acompañadas por poderosas personas que se identificaron de diferentes maneras con la invitación a Quemar el Miedo, mediante un rito unificador”, aseguran las artistas, mencionando a organizaciones como Las Madres y familiares de Las o Los Desaparecidos, Las Mujeres que Luchan, Las Antimonumentas, Restauradoras con Glitter y diferentes organizaciones que se activaron en Avenida Reforma, para luego comenzar una serie de intervenciones en diferentes zonas, tanto de la Ciudad como del Estado de México. Cuauhtémoc, Tlatelolco, Popotla y Nezahualcóyotl.
Por último, y pensando en su paso por la Casa de Bello, Moena y Motto manifiestan que, para ellas, la Universidad fue una decisión política y fue elegida por ser una institución “con un rol social que podemos activar desde nuestro quehacer artístico, y para ello es clave entender lo que la Escuela de Artes ha representado históricamente bajo este contexto. En este sentido, ha sido nuestro primer espacio de intercambio y vínculos que nos han acompañado hasta la actualidad”.