Miembro del círculo de honor de la Facultad de Economía y Negocios, la especialista en finanzas e inversiones ha ayudado a más de 86 mil pymes mediante estrategias de coaching y mentoring. También es la primera mujer en fundar una empresa financiera en el país. Hoy vuelve a su alma mater para impartir una charla sobre la importancia de la imagen personal en el ámbito laboral.

Por: Sebastián Cornejo

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Erguida con firmeza, Gabriela Salvador está frente a los invitados de la charla “Imagen personal y desarrollo laboral” realizada por Alumni UChile en la Casa Central.Viste una blusa blanca de la cual resalta una sutil hebilla circular plateada de un delgado cinturón. Un collar rojo de perlas que pende de su cuello hace juego con sus zapatos carmesí de tacón cuyas puntas quedan al descubierto bajo la caída del pantalón de tela de tiro alto color azabache. Es un conjunto escogido con mucho cuidado y atención.

“Limpio, empoderado, seguro”, así define Salvador su estilo e imagen personal en el trabajo. No es simplemente cómo nos vemos en la oficina, sino que, según ella, es una elección diaria que influye en las carreras de las personas.

Gabriela Salvador entró a estudiar a la FEN durante la década de los noventa. Heredera de una familia de financistas, escogió la Universidad de Chile en particular para “obtener un liderazgo universal y comprender el funcionamiento del país en todos los estratos”. Su sueño era bien claro: poder liderar un banco, objetivo que logró en gerencias de CorpBanca, Citi, Banco de Chile y en la corredora de bolsa Vantrust Capital, de la cual es directora hace más de 11 años, convirtiéndola en la primera mujer chilena en crear una empresa de ese estilo.

“Con mis compañeros queríamos cambiar el país, servir al país, y eso no estaba en el colegio”, recuerda haciendo alusión a su paso por la Facultad. Es por eso por lo que en 2020 co-fundó Chile Converge con la misión de asesorar pequeñas empresas de manera gratuita. Desde allí, colaboran con 70 pymes al día y hasta la fecha han podido ayudar a levantar los negocios de más de 86 mil personas mediante el mentoring en el desarrollo de herramientas como marketing digital, e-commerce, y búsqueda de financiamiento: “Creo que a través del emprendimiento podemos ayudar la situación de muchas familias”, detalla.

Su liderazgo es notorio tomando en cuenta que se forjó en un ambiente rodeado de hombres. Según un informe de 2021 elaborado por la Comisión del Mercado Financiero, las mujeres que cuentan con un cargo directivo empresarial son solo el  30%, con una brecha salarial que puede llegar a superar el 13%.

Esto no desalentó la marcha profesional de Salvador. El Women Economic Forum destacó a Gabriela como una de las 100 mujeres más influyentes del mundo, quien además de dedicarse a las finanzas, tiene tiempo para realizar seminarios de empoderamiento femenino: “todavía estamos en una sociedad machista. Estás quebrando un contrato social invisible, el cual es que la mujer se meta espacios tradicionalmente masculinos. Cuando me toca ganar un premio, hay gente que no me pregunta por qué lo gane, más bien  por qué estudié Ingeniería Comercial”, comenta.

Proyectando hacia el futuro declara que lo ve prometedor: “no puede ser que sea la única. Yo quiero que las mujeres se atrevan y eso requiere determinación”. 

La importancia de la imagen personal en el ámbito laboral

A pesar de declarar que sufrió acoso laboral y violencia de género, la financista llegó a desarrollar varias herramientas para hacer frente y luchar por un espacio dentro del gremio: una de ellas es la imagen personal.

“Me interesa que la mujer dimensione cuál es el impacto que tiene la imagen que uno elige dar diariamente. La ropa tiene que estar a mi servicio, no yo al servicio de mi ropa”, reflexiona. La clave inicial para poder tener conformidad y sentirse cómodos con la imagen personal de uno es, según la experta, la auto-aceptación de lo físico para así construir una “línea editorial” o “sello personal” de los atuendos y maquillaje.

“La ropa te tiene que quedar cómoda. Si el pantalón está muy apretado o la blusa tiene demasiado escote voy a estar incómoda y voy a expresar incomodidad. Ahora yo estoy cómoda con la ropa que estoy usando y eso significa que la persona que está al frente me va a tomar como una persona segura y confiable”, detalla.

Consideraciones para tener una imagen personal exitosa en el campo laboral:

• Lograr una buena primera impresión de confianza, comodidad corporal y amabilidad, ya que condiciona el juicio sobre uno en el ámbito profesional: los 7 primeros segundos son clave. 
• Entender que la elección de vestimenta y maquillaje tiene que ser acorde al contexto laboral.
• Preocuparse de la higiene corporal y la limpieza.
• Ser conscientes de la comunicación no verbal como la actitud y postura del mentón y espalda para transmitir serenidad.
• Conocer cuáles son sus propios intereses laborales y objetivos para crear un closet personalizado para estilizar un sello y personalidad en base a sus oportunidades.
• No hay colores prohibidos para usar en el ámbito laboral, pero hay que ser criteriosos y siempre pensar en constancia y consecuencia para diseñar un sello característico personal.